El motor de un vehículo al ser un elemento termodinámico, necesita de un sistema eficiente de refrigeración con el fin de poder desarrollar su misión a la temperatura ideal de trabajo.
Este sistema de refrigeración no sólo lo compone el radiador y el ventilador del mismo, sino el líquido refrigerante o anticongelante de tu coche.
Este líquido tiene entre sus propiedades una temperatura de ebullición superior a los 110 º C para evitar el recalentamiento del motor y una temperatura de congelación muy baja para evitar helarse en invierno y producir daños irreparables en el motor o en los conductos de refrigeración del mismo.
Recomendamos sustituir el líquido de refrigeración cada 2 años, debido a que las propiedades de los inhibidores anticorrosión del líquido se degradan con el paso del tiempo
Con el clima desfavorable de nieve que actualmente estamos viviendo en nuestras carreteras, lo idóneo es comprar neumáticos 4 estaciones. ¡Consigue las mejores ruedas para estas temperaturas con estas fantásticas ofertas!
¿Sabes por qué debes revisar el anticongelante del coche en verano? Sí, al líquido refrigerante de tu vehículo también se le debe prestar atención incluso durante los meses más calurosos.
Realizar en el momento oportuno el mantenimiento del vehículo es uno de los aspectos que marcará la diferencia en la conducción. No solamente porque tenga siempre el estado óptimo, sino porque se deteriorará menos ante los elementos que necesiten una revisión del coche.
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